Una vez, un flaco y hambriento Lobo se encontró en el camino con un Perro gordo y muy bien cuidado. El Lobo curioso, preguntó al Perro:
"Dime amigo Perro, ¿a qué se debe, que siendo yo más fuerte que tú, no encuentre qué comer?"
El Perro contestó:
"Pues se debe a los cuidados de mi amo. El me da pan y los huesos que le sobran; además, no tengo otra obligación mas que vigilar su casa. Si gustas puedes gozar de lo mío cumpliendo las mismas obligaciones."
El Lobo respondió:
"De acuerdo, creo que es mejor vivir así a que vagar por el campo en busca de sustento. Pero dime algo, ¿qué es eso que tienes en el cuello?"
El Perro contestó:
"Esto es el collar de la cadena con que me atan a la perrera durante el día. En cambio de noche soy libre de ataduras, y corro por donde quiero."
El Lobo pensando, dijo al Perro:
"Pues si no eres libre, goza de tus bienes que yo no los quiero, ni quiero que sacrificar mi libertad."
Moraleja
Más vale la libertad, a la más regalada esclavitud.