Esopo fue un antiguo fabulista griego, que se supone que fue un esclavo liberado de Frigia. Su nombre se relaciona con fábulas de animales, transmitidas por tradición oral desde hace mucho tiempo. Las fábulas de animales forman parte de la cultura común de los pueblos indo-europeos y tal vez constituyan la colección de fábulas más leídas de la literatura mundial.
Muchas de las fábulas de Esopo fueron reescritas en verso por el poeta griego Babrio, probablemente en los siglos I y II a.C., y en latín por el poeta romano Fedro en el siglo I d.C. La colección que actualmente lleva el nombre de Esopo consiste en su mayor parte, en explicaciones posteriores de las fábulas de Babrio. Su escritura influiría considerablemente en escritores posteriores, como es el caso del poeta francés del siglo XVII Jean de La Fontaine y del español Félix María de Samaniego, del XVIII.
En la época clásica, su figura se vio rodeada de elementos legendarios, e incluso, se ha puesto en duda su existencia por algunos historiadores. Sus fábulas, se utilizaban como libros de texto en las escuelas y Platón dice que Sócrates se sabía de memoria los apólogos de Esopo.
La estructura de la fábula esópica ha sido definida por varios autores, pero la más completa se le atribuye a Nojgaard, quien distingue en la narración tres elementos o momentos imprescindibles:
Esopo (620-560 a.C.)
1.- La situación de partida en que se plantea un determinado conflicto, entre dos figuras generalmente animales.
2.- La actuación de los personajes, que procede de la libre de los mismos, entre las posibilidades de la situación dada.
3.- la evaluación del comportamiento elegido, que se evidencia en el resultado pragmático, el éxito o el fracaso producido por tal elección.
En sus fábulas hay una enseñanza moral, no una doctrina. Recogen experiencias de la vida cotidiana que forman un conjunto de ideas de carácter pragmático.
Para leer un poco de las Fábulas de Esopo, pueden visitar esta SECCIÓN donde hemos recopilado las Fábulas de Esopo.
FÁBULAS DE ESOPO
Esopo a lo largo de su existencia, realizó una gran colección de fábulas. Muchas de ellas, fueron adaptadas por diversos autores como Babrio y Fedro durante la época romana. También otros autores como Jean la Fontaine y Félix María Samaniego fueron parte de ellos que, apasionados por su obra, realizaron gran labor y claro, fomentó sin decaer valor cuando se mezclaron los fabularios con los grecorromanos en la Edad Media. Pese a hoy en día, siguen siendo valorados por sus mensajes.
Si buscas conocer cuáles fueron aquellas fábulas de esopo, te invitamos a leerlas en nuestra próxima página más abajo.
0 comentarios:
Publicar un comentario