Hace mucho, un gran Perro que fue exterminador de Lobos, murió en una feroz pelea ocasionando el llanto de su Amo. Un Carnero vio a su Amo llorar por su Perro, y l e dijo:
"Señor. Córteme los cuernos y cúbrame con la piel del Perro. Los Lobos creerán que soy él, y así huirán."
El Pastor, acogido por la idea, lo hizo.
Al poco rato, un Lobo hambriento ingresó al rebaño y tomó a un Corderito para hacerlo su cena. El falso Perro de inmediato persiguió al ladrón pero, al pasar por un matorral, una de las ramas se aferró a la piel del Perro, e hizo desprenderse del Cordero quedando así el engaño descubierto. El Lobo, al ver al falso Perro le dijo:
"Y tú, ¿que se supone que eres?"
"Soy un Carnero fiel a su Amo." - Respondió.
"Bueno, aunque uses ropas ajenas, eres comida para mi." - Dijo el Lobo que sin mucha demora, devoró al Carnero.
Moraleja
Aunque cambies de vestido,igual se cumplirá tu destino.