Hace mucho tiempo, en un viejo Roble, vivían una Águila con sus crías, una Gata montes con sus bebés, y a una Jabalina con sus crías. Todos vivían en paz y armonía, hasta que un día, la sinvergüenza Gata se acercó al Águila, y le dijo lo siguiente:
"Vecina Águila. Me he dado cuenta que la fiera que habita abajo, no cesa de cavar para derribar nuestro Árbol. Cuando haya acabado y el Árbol haya caído, se comerá a nuestros hijos. Tengamos mucho cuidado de ella."
El Águila tras oír eso, se quedó preocupada. Por otro lado, la Gata fue donde la Jabalina y le susurró lo siguiente:
"¿Sabes vecina?, hablé con la señora Águila y me dio a entender que espera el momento adecuado en que te marches para ir por tus hijos y devorarlos."
El Águila y la Jabalina muy dudosas por dicha conversación, decidieron no abandonar sus casas para cuidar de sus Hijos. Conforme pasaba el tiempo, ambas de no salir a buscar comida para ellas ni para sus crias, perecieron de hambre.
La Gata, viendo los restos de las "enemigas", se dio un gran festín junto a sus crías gracias a los chismes falsos de la vecina Gata.
Moraleja
A quien te engaña con un cuento,despreciarlo al momento.