Cierta vez, una familia Lirón conformada por abuelos, hijos y nietos, se reunió al pie de un árbol para discutir sobre los alimentos de su árbol.
El hijo lirón mayor tomó la palabra y dijo:
"Familia, sabemos que los frutos de este árbol son exquisitos, pero nos cuesta mucho esfuerzo recogerlos debido a que están muy altos. Yo sugiero que para evitar treparnos constantemente, debamos derribarlo y así, tendremos todos sus deliciosos frutos a nuestro antojo."
Los demás lirones apoyaron al hijo lirón mayor soltando gritos, aplausos y sonrisas.
El viejo Abuelo lirón, se puso de pie, y dijo:
"Bien, yo no creo que tengas toda la razón. Si lo pensamos detenidamente, al morir el árbol, este año gozaríamos de todos sus frutos; pero, ¿Qué pasará después?. En árbol muerto ya no habrá fruto que él dé.
Yo prefiero cansarme recolectando los frutos cada día, a morir de hambre."
Moraleja
Más vale trabajo pesado que ocio de desocupado.