Cierta vez, un León que después de su gran banquete, decidió tomar una siesta cerca del estanque lleno de floresta.
En aquel lugar, vivía una Rana gritona que se puso a cantar fuertemente sin importarle quien la escuche. El León despertó de inmediato por tal bulla y, muy molesto por el canto, sacudió su melena, e inició la búsqueda de aquella intrusa para darle su merecido castigo.
"¡¿Quién se atreve a perturba mi sueño placentero?!" — Dijo el León.
A los pocos segundos de su búsqueda, el León encontró a la ruidosa Rana y sin mucho reparo, la pisó. Luego dijo:
"Señora Rana. Haga menos ruido y tenga más respeto para el sueño de su Rey."
Moraleja
Quien respeta dignidad,tiene la vida segura.