Hace mucho en un lugar donde la ciencia era muy importante para sus habitantes, había un Astrónomo que gustaba de caminar siempre por las noches para observar las estrellas.
Un día, uno de sus colegas le comentó que en el cielo había aparecido un extraño astro. El Astrónomo fascinado por dicha novedad, decidió salir de la cuidad para poder ver con sus propios ojos aquella nueva estrella.
Caminando fervientemente hacia su destino, imaginaba y soñaba una y otra vez cómo sería aquella estrella, sin embargo en su caminar, no se percató de que más adelante había un agujero y cuando ya era demasiado tarde, lo pisó y cayó hacia el piso.
Cerca donde cayó el Astrónomo, pasó un Hombre que al verlo, se acercó y le dijo:
"Permíteme ayudarte amigo, pero ten cuidado por donde caminas a la próxima. Debes estar atento hacia donde vas, ya que te puedes encontrar con cualquier cosa en tu camino."
Moraleja
Antes de lanzarse a la aventura,
hay que conocer el lugar por donde se transita.