Trabajando un Gusano su capullo,
la Araña que tejía a toda prisa,
de esta suerte le habló con falsa risa,
muy propia de su orgullo:
"¿Qué dice de mi tela el señor gusano?,
ésta mañana la empecé temprano,
y ya estará acabada a mediodía.
¡Mire qué sutil es, mire qué bella!..."
El Gusano, con disimulo respondía:
"¡Usted tiene razón; así sale ella!"
Moraleja
Se ha de considerar la calidad de la obra,y no el tiempo que se ha tardado en hacerla.